domingo, 12 de junio de 2011

Soy el de educación física!

¡YO SOY EL MAESTRO DE EDUCACIÓN FÍSICA! Sí, ¡yo soy el de Educación Física!
Formo parte de un cuerpo especial, de un grupo de docentes privilegiados, de un una banda de ilusionados, de los que se conectan con sus alumnos, de los que valoran la educación en toda su globalidad, de los que tratan de mejorar día a día, de los que se sienten solos en los claustros, de los que las familias no solicitan su acción tutorial, de los que pasan frío y calor por esos patios, de los que todavía les queda mucho por aprender, de los olvidados por la administración... Sí, soy el de Educación Física.
Cuando los cimientos de la escuela se tambalean porque sus enseñanzas han dejado de interesar a nuestros alumnos, la Educación Física se muestra como uno de los pilares que aún la sostienen. Los niños vienen a la Escuela felices cuando ese día tienen "Educación Física". Llegan con ilusión y motivación. ¿Qué se le ocurrirá al maestro? ¿Maestro que vamos hacer hoy? Esas preguntas nos llenan de satisfacción y aumentan nuestra maltrecha autoestima. Es entonces cuando nos colgamos la placa en el pecho, como si de un Sheriff se tratara. ¡Somos los de Educación Física! Con nuestros alumnos nos sentimos importantes porque ellos nos valoran. Cabalgamos de clase en clase como un "Llanero solitario", porque somos los de Educación Física. Nuestros alumnos están ávidos de tomar su clase de Educación Física, recogen rápidamente los libros y sus enseres en cuanto abrimos la puerta del aula, esas caras aburridas se transforman, los ojos le brillan, echan chispas, en sus rostros, se empiezan a dibujar sonrisas, están impacientes, se mueven de las sillas, se nota un cierto nerviosismo por salir al patio de la escuela cuanto antes, gritan: ¡Ha llegado el maestro de Educación Física! Somos especiales porque nuestra asignatura es especial, aprovechemos su motivación intrínseca. No dejemos escapar esa gran oportunidad educativa.
Apriétate el cinturón, colócate bien la placa, ajústate el sombrero y vamos a jugar, vamos a crear situaciones de aprendizaje en donde los niños se sientan a gusto, seguros, ilusionados, con ganas de moverse... Aprovechemos la motricidad para educar, formemos personas competentes, trabajemos sus emociones y sus relaciones sociales, hagamos de ellos personas más autónomas y autosuficientes, mejoremos su autoestima, fomentemos su creatividad, desarrollemos su capacidad de esfuerzo... Olvidemos nuestras frustraciones profesionales, esquivemos las zancadillas que nos pone la sociedad, ignoremos los prejuicios sobre nuestra área. Somos como los "Hombres de Harrison" o “Brigada A", como "Rambo" o "Superman". Sintámonos orgullosos de lo que somos. Te vuelvo a decir, somos un cuerpo especial.
Nos reducen los horarios, se nos marginan de las competencias básicas, ¿Y la competencia motriz, dónde está? ¿A dónde vamos a ir a parar?... Quieren alumnos competentes, ¿pero en qué? En lengua, matemáticas y en el conocimiento e interacción con el medio. ¿Y las otras cinco competencias? ¿Quién las va a desarrollar? ¿Cómo puede interactuar un niño desde su banco del aula, quieto y callado? ¿Cómo puede mejorar su autonomía personal si no ha desarrollado sus cualidades, habilidades y destrezas motrices? ¿Cómo puede interactuar con los demás si sólo puede relacionarse con los compañeros de las mesas que hay a su alrededor?.. . Está claro que somos un "grano negrito en el arroz" para la administración; entorpecemos los horarios; somos el relleno o la hora de descanso para los maestros enclaustrados. Se dice que nuestras labores fácil se suplen; las suple un maestro que "de todo sabe y de nada entiende". Sin embargo, en nuestras ausencias los patios lucen tristes, apagados y faltos de vida. ¡Nada es igual en nuestra ausencia! ¡SOMOS LOS DE EDUCACIÓN FÍSICA! Y no olvidamos nuestras raíces como verdaderos docentes, arduamente formados en las aulas universitarias y normalistas, prestos a la lid en el campo de la faena magisterial. ¡SOMOS LOS DE EDUCACIÓN FÍSICA! ¡SOY EL DE EDUCACIÓN FÍSICA!

Asamblea en la carpintería.



Cuentan que en la carpintería hubo una vez una extraña asamblea. Fue una reunión de herramientas para arreglar sus diferencias.
El martillo ejerció la presidencia, pero la asamblea le notificó que tenía que renunciar. ¿La causa?, ¡Hacía mucho ruido! Y además se pasaba el tiempo golpeando.

El martillo aceptó su culpa, pero pidió que también fuera expulsado el tornillo, dijo que había que darle muchas vueltas para que sirviera de algo.
Ante el ataque, el tornillo aceptó también, pero a su vez pidió la expulsión de la lija. Hizo ver que era muy áspera en su trato y siempre tenía fricciones con los demás. Y la lija estuvo de acuerdo, a condición que fuera expulsado el metro, que siempre se la pasaba midiendo a los demás según su medida, como si fuera el único perfecto.

En eso entró el carpintero, se puso el delantal e inició su trabajo.

Utilizó el martillo, la lija, el metro y el tornillo. Finalmente, la tosca madera inicial se convirtió en un lindo mueble.

Cuando la carpintería estuvo nuevamente sola, la asamblea reanudó la deliberación. Fue entonces cuando tomó la palabra el serrucho, y dijo:

"Señores, ha quedado demostrado que tenemos defectos, pero el carpintero trabajó con nuestras cualidades. Eso es lo que nos hace valiosos. Así que no pensemos ya en nuestros puntos malos y concentrémosnos en la utilidad de nuestros puntos buenos."

La asamblea encontró entonces, que el martillo era fuerte, el tornillo unía y daba fuerza, la lija especial para afinar y limar asperezas y observaron que el metro era preciso y exacto.

Se sintieron entonces un equipo capaz de producir muebles de calidad. Se sintieron orgullosos de trabajar juntos.

- ¿Ocurre lo mismo con los seres humanos?
Observemos y lo comprobaremos. Cuando en una familia, empresa, las personas buscan a menudo los defectos en los demás, la situación se vuelve densa y negativa. En cambio, cuando tratamos con sinceridad de percibir los puntos fuertes de los demás, es ahí donde florecen los mejores logros humanos.

Es fácil encontrar defectos. Cualquiera puede hacerlo, pero encontrar cualidades, eso es para los espíritus superiores que son capaces de inspirar todos los éxitos humanos.

Solo respira.

''Si, lo sé, no soy perfecta… Suelo tener ataques de risa en un momento de plena seriedad, y ser prácticamente una loca en la calle. Soy de expresar mis sentimientos con el cuerpo. Tengo ataques de tristeza, como de felicidad, hay días en los que camino con la cabeza entre los hombros y mirando el piso, y otros en los que la gente me mira con cara extraña, por reírme sin motivos y estando sola. Tengo amigas, amigas divertidas como yo, gracias a dios no son todas iguales.Cada una es diferente, tiene sus gustos, sus personalidades, y digamos que juntas somos imparables. Suelo pelearme con ellas a menudo,capaz discutimos porque una dice que un auto que pasó era negro, y otra dice que era azul. Pero después de un rato, nos cagamos de risa y nos ponemos a pensar lo ridiculas que podemos llegar a ser por solo un momento. Como todo ser humano, tengo recuerdos, no todos son BUENOS, pero siempre los voy a llevar conmigo. Tengo personas con las cuales compartí gran parte de lo que llevo vivido, y por alguna razón de la naturaleza ya no estamos juntos/as, no importa, sé que su presencia fue importante y no los culpo, en un futuro quizá nos reencontremos, o le cuente a mis hijos mis locas travesuras… No soy normal, eso está claro, y suelo tener muchos cambios de humor y mi cara puede demostrártelo perfectamente. Digamos que para la humanidad no soy alguien que se encuentre en cualquier parte del mundo y eso me hace sentir un poco especial… No soy perfecta, creo que nadie es perfecto. No sé, mi opinión es que no hay una Ley.No hay una ley que te enseñé como tienes que vivir la vida, que te diga como tienes que hacer, y tus gustos como tienen que ser. No hay nada escrito que te indique cual es el camino correcto, y quiénes son las personas indicadas. Nadie dijo como tiene que ser una persona para considerarce en el ‘GRUPO DE LOS LINDOS’. Pienso que todos somos hermosos de distintas maneras, con diferentes cosas… Creo que podemos lograr lo que sea, si sólo confiamos en nosotros, en quiénes somos.
No importa si eres rubia, morocha, gorda, flaca, caderona, con pechos grandes, no importa como sea tu nariz, como te vistas ,o como es tu cabello, eres hermosa a tu manera y algun dia vas a encontrar a alguien que te quiera tal como eres. Soy fuerte, pero ultimamente me he sentido mas fragil que nunca, siento que en cualquier momento me voy a quebrar, y nose porque, pero tengo miedo, o quizas si lo se, no tengo idea, pero se que tengo miedo.. Acostumbro a siempre tener una sonrisa para todo, a reirme mucho, a siempre ser positiva, y darle animo a los demas, pero eso no quiere decir que yo siempre este bien. No me gusta llorar, detesto contar mis problemas, y darle lastima a la gente, y de hecho, estoy cansada.. y no me quejo porque se que yo decido ser asi.. pero hay momentos en que lo unico que necesito, es que me digan “Estoy contigo” y me abrazen, y me sostengan mientras lloro todo lo que necesito llorar.. y que me miren, y me digan.. Solo Respira.''